El Hierro

Me gusta tanto ésta isla que no sé por donde empezar a describirla , voy a ir haciéndolo poco a poco, hoy hablaré del árbol sagrado de los bimbaches (antiguos pobladores de la isla) el Garoé.

El árbol de Garoé era tan grande que para abrazarlo se necesitaban tres hombres cogidos de la mano, se cree que podría haber sido un laurel excepcionalmente enorme, éste árbol ya no existe, un huracán se lo llevó allá por el 1610 , en su lugar se plantó éste que apenas se ve detrás del Sisco, está dentro de una oquedad en la roca.

El paisaje que lo rodea es realmente encantador, alrededor del árbol hay unas pequeñas cuencas llenas de agua donde florece vegetación. Los Binbaches, obtenían el agua que destilaba el Garoé. Las nubes, empujadas por los Alisios quedan atrapadas en las zonas altas de las Islas y se produce un bellísimo fenómeno; la llamada lluvia horizontal. Las nubes que pasan a través de las hojas de los árboles hace que se condensen y se transformen en gotas de agua. Es así cómo la leyenda cuenta que un sólo árbol, el Garoé, proporcionaba agua a todos los habitantes del Hero ( Hierro).

La leyenda también cuenta que cuando llegaron los conquistadores Españoles los Bimbaches se reunieron en una asamblea para ocultar la ubicación del Garoé y no revelar, bajo pena de muerte, de dónde obtenían el agua. Así todos los habitantes se proveyeron de agua y se prohibió acercarse al árbol hasta que los conquistadores se fuesen convencidos de que en aquella isla no se podía subsistir por carecer de agua potable.

Pero todos los esfuerzos por ocultar el árbol se vieron truncados por una joven Bimbache que se enamoró de un esbelto andaluz y le mostró cómo el árbol sagrado a través de sus hojas dejaba caer el agua. Agarfa, la joven aborigen, fue ahorcada pero la conquista de la isla era ya inevitable.